

El Modelo
Propone una metodología concreta y diferenciada que coloca el arte y la creatividad en el corazón de la mediación, permitiendo un aprendizaje transversal en la comunicación, en las relaciones interpersonales y en la transformación positiva de conflictos.
El eje
Está puesto en que las personas que participan puedan contar con nuevos elementos para relacionarse y comunicarse de manera mas asertiva; visibilizar los recursos necesarios para construir desde la integración y la diversidad y afrontar situaciones conflictivas de manera creativa.

La clave
Es generar espacios colectivos de encuentro promoviendo lazos colaborativos y prácticas colectivas participativas.
El contenido de la propuesta se enmarca en las habilidades para la vida, siendo éstas: el autoconocimiento, la empatía, la comunicación asertiva, las relaciones interpersonales, la toma de decisiones, la gestión de los conflictos, el pensamiento creativo, el pensamiento crítico, el manejo de emociones, tensiones y estrés.

Los principios fundantes
Comulgan con la Educación para la Paz, entendiendo la misma como "un proceso educativo, dinámico, continuo y permanente, fundamentado en los conceptos de paz positiva y en la perspectiva creativa del conflicto y que, a través de la aplicación de enfoques socioafectivos y problematizantes, pretende desarrollar un nuevo tipo de cultura, la Cultura de la Paz, que ayude a las personas a develar críticamente la realidad para poder situarse ante ella y actuar en consecuencia."